13 mayo 2009

COMO SIMBAD

Embarcado en el trajín de los recuerdos
van las palabras
balanceadas en su vaivén
de pésames y placeres.

Hay que soltar amarras
perderse en la odisea
antes que la locura
asome por la brújula
y me deje a la deriva
de insomnios y olvidos.

No quemaré mi barca
antes, soltaré
los silencios mustios
a los fuegos fatuos
de las tumbas impávidas;
queden así las voces
en este mar irreverente.

Es largo el viaje
y la red es grande
sopla el viento a mi favor
leven anclas...